La obra Meditación sobre la pena de muerte es una investigación con enfoque pluridisciplinario, en donde priva la reflexión filosófico-jurídica. No obstante, no se ha querido prescindir del auxilio de las perspectivas teológica, estadística, criminológica y sosiológica. Lo que importa a final de cuentas, no es tanto la pureza del método, sino el resultado obtenido en la ¡nvestigación. El estudio de las penas resulta básico para encontrar el sentido, o sinsentido, de la pena de muerte. El autor no emprende una historia de este problema, peo sí lo examina a lo largo de la historia. Las grandes declaraciones históricas sobre el tema no podrían estar ausentes en este lúcido y riguroso examen. Tras una apasionada y apasionante búsqueda d las razones que asisten a los abolicionistas y a los partidarios de la pena de muerte, el libro concluye con la siguiente tesis fundamental: la persona humana tiene, por definición, derecho a la vida y a la integridad corporal. A través del estudio profundo d la dignidad humana en la esfera óntico-axiológica, el doctor Basave descubre tres notas constitutivas esenciales inalienables del ser humano: deiformidad, teofanía y teotropismo, por tanto ningún delincuente, por perverso y abyecto que sea, deja de ser persona, con esas características. A la luz de a dignidad humana se demuestra la criminosidad, la inutilidad, la ineficacia, la esterilidad de toda pena de muerte que inflige el Estado. No cabe, pues, en buena tesis, matar personas que matan personas para mostrar que es malo matar personas. La enérgica vocación del doctor Agustín Basave Fernández del Valle para salvaguardar la vida humana, aun en los casos de los más torvos delincuentes, le ha llevado a emprender una lucha para derrotar definitivamente los argumentos de los defensores de la pena de muerte.
